El cliente
El proyecto contaba con aspectos singulares e interesantes por desarrollar. La primera particularidad consiste en que el terreno es propiedad de dos parejas: dos hermanas regiomontanas casadas con dos suizos. El siguiente detalle es que una de las parejas vive y trabaja actualmente en Basel, Suiza, y la otra en Pennsylvania, EUA.
Los clientes requerían el proyecto de una casa que se pudiera vivir en diversas etapas. En la primera, funcionaría como casa de vacaciones para ellos y como casa de fin de semana para sus familiares de Monterrey. En la siguiente fase, se planea que la quinta pueda rentarse para eventos sociales o como casa de campo para cortas estancias. En la tercera etapa, las dos familias vendrían a vivir a México, habitarían en sus casas en este terreno, y muy probablemente continúen recibiendo invitados, familiares y amistades. El concepto dual de privacidad y comunidad, de unión y aisalmiento, debiera resolverse en la configuración misma del proyecto habitacional.
El programa de necesidades incluía una casa de invitados con cinco habitaciones, cocina, desayunador, sala, comedor, terraza, alberca, sauna, churrasquería, casa familiar, cancha deportiva, habilitación de caminos vehiculares y peatonales, jardines, huerto, áreas de servicio, bodegas y casa para el cuidador.